El pasado 28 de abril se realizó el webinar “Desafíos y Oportunidades en Gestión Hídrica Local”, encuentro organizado por la Dirección de Extensión y Vinculación con el Medio a través del Observatorio de Desarrollo Estratégico Regional de la Universidad de Tarapacá y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Arica y Parinacota (ASCC).
La primera ponencia estuvo a cargo del ingeniero agrónomo y académico de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la UTA, Juan Trevizan Rispoli, con el tema “Caracterización de los recursos hídricos del valle de Azapa”, donde expuso sobre la dinámica de los recursos en su dimensión ambiental, técnico y organizacional.
En su presentación se refirió al valle de Azapa como una de las zonas más secas del mundo, resaltando que, “el valle de Azapa es una quebrada bastante estrecha producto de las distintas eras geológicas donde los recursos hídricos escurrían desde las cabeceras de esta cuenca, socavando los terrenos hasta formar el valle de Azapa”.
Al realizar un recorrido histórico el académico de la Facultad de Ciencias de la UTA, resaltó que en el pasado la agricultura local se desarrollaba gracias a los recursos hídricos: “en Arica se generaba una agricultura en los afloramientos de vertientes en el sector de la Chimba, afloramientos de vertientes en la parte baja del valle del kilómetro 14 hacia abajo y la utilización de las aguas de las avenidas del invierno altiplánico entre los meses de diciembre a abril, donde la agricultura estaba supeditada a pequeñas superficies en comparación a lo que hoy en día se desarrolla en el valle de Azapa”, explicó.
Agregó que en el año 1962 en adelante, la agricultura del valle de Azapa presentó un constante crecimiento, “con el desarrollo de la agricultura también a través de políticas que han incentivado la migración a la ciudad, tanto del sur del país como de los pueblos del interior, se ha generado cada vez más una presión por los recursos hídricos”, destacó Juan Trevizan.
“Con el crecimiento de la ciudad, se acaba la agricultura de la Chimba y la ciudad demanda agua potable que se extrae de pozos profundos dentro de la ciudad, donde la población entre los años 60 y 2020 se triplica. En la década de los 80 y 90 producto de la sequía y del aumento de la población, los pozos de la ciudad se comienzan a salinizar y el sistema de agua potable a cargo de ESSAT ingresa con una batería de pozos al valle de Azapa, conllevando a que los niveles de agua de los pozos bajaran y los agricultores debieron profundizar sus pozos de agua para el riego de sus cultivos”, expuso el académico.
Posteriormente fue el turno de Johanna Guzmán Cerda, ingeniera civil ambiental y encargada nacional del Control y Supervisión de Acuerdos Voluntarios en la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, quien expuso el tema “Acuerdos de producción limpia, un aporte a la gestión hídrica regional”, donde conversó respecto al contexto institucional, a sus instrumentos, resultados de impacto y finalmente, a la APL-Gestión Hídrica de la ASCC.
“Llevamos 20 años de experiencia en lo que era antes el Consejo Nacional de Producción Limpia con una mirada siempre de eficiencia productiva. Hoy en día el concepto ha ido evolucionando y es lo que se conoce como economía circular, sin embargo, desde la génesis de la Agencia hemos ido enfocando esta eficiencia productiva”, indicó la profesional.
Agregó que la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático es una institución que acerca a las empresas y a los territorios en miras de eficiencia productiva hoy en día tan necesaria sobre todo con temas de recursos hídricos, junto con ello, la Agencia es el brazo articulador en términos de implementación de políticas de cambio climático en sustentabilidad.
“A través de nuestros instrumentos aportamos a la adaptación al cambio climático, a la reducción de emisiones de GEI y a la sustentabilidad de las empresas y territorios. Nuestros acuerdos de Producción Limpia Sectorial y Territorial enfocados en: Producción Limpia Sectorial, Gestión Hídrica y acuerdo de Preinversión”, destacó Johanna Guzmán.
Respecto al tema de las áreas propensas a sequías y lo que significa en la Región de Arica y Parinacota la escasez hídrica, la expositora comentó sobre la preocupación en este tema donde la disponibilidad del agua en el norte y centro de Chile podría disminuir hasta más de 50 por ciento y que nos indican que es necesario actuar ante este escenario y repensar sobre el ciclo del agua reconociendo las intervenciones de los seres humanos. “Repensar un sistema socio-eco-hidrológico dinámico que da cuenta de la interacción directa de los distintos sectores productivos que contribuyen tanto en calidad como en cantidad del recurso, puesto que hay impactos asociados con el recurso, que afectan directamente a la población, pero también a los ecosistemas en los cuales se están interactuando”, concluyo Johanna Guzmán.
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