
El pasado viernes 8 de noviembre, el Gimnasio Mayor de la Universidad de Tarapacá acogió el congreso internacional “Educación Emocional en el Aula: Cómo Regular Emocionalmente a Nuestros Estudiantes”. El evento, organizado por la Asociación de Establecimientos Particulares y Subvencionados (ADEP) en conjunto con la la Facultad de Educación y Humanidades, alcanzó el máximo aforo del gimnasio, gracias al apoyo del Doctorado en Educación de la Universidad de Tarapacá y del Centro de Innovación y Liderazgo Educativo (CILED). La jornada fue un éxito, no solo por la destacada asistencia, sino también por las dinámicas de las exposiciones, lideradas por expertos en educación emocional como Arnaldo Canales, María José Palmero y Miguel Ángel Santos.
El congreso tuvo como propósito profundizar y reflexionar sobre el papel crucial de la educación emocional en el ámbito educativo, considerándola como un proceso continuo, sistemático y constante que impulsa el desarrollo de habilidades emocionales, esenciales para el desarrollo integral de las personas, promoviendo su bienestar personal y social. Además, se destacó la importancia de generar ambientes inclusivos, organizados, respetuosos y comprometidos con la convivencia positiva, elementos fundamentales para crear condiciones propicias para el aprendizaje. Estos factores favorecen un mayor interés, motivación y participación de los estudiantes ante nuevos retos educativos.
Durante el evento, el Dr. Carlos Mondaca Rojas, decano de la Facultad de Educación y Humanidades de la Universidad de Tarapacá, destacó la relevancia de llevar a cabo iniciativas como esta y felicitó a los organizadores del congreso. Por su parte, Mery Martínez Limache, presidenta de la Asociación de Establecimientos Particulares, Subvencionados y Pagados de Arica (ADEP), señaló que el congreso fue una respuesta “a una demanda y una necesidad que tienen las unidades educativas de cómo enfrentar las desregulaciones emocionales de los estudiantes tras la pandemia. Estamos felices de que hoy se haya concretado este evento”.
La primera presentación, titulada ‘Educación Emocional: Emociones Facilitadoras y Obstaculizadoras del Aprendizaje’, estuvo a cargo de Arnaldo Canales Benítez, PhD (c) en pedagogía y educación. El objetivo de su intervención fue enseñar a los educadores a diseñar experiencias de aprendizaje que no solo transmiten conocimientos, sino que también inspiran a los estudiantes a convertirse en aprendices de por vida, motivados a descubrir y comprender el mundo que los rodea. Canales Benítez destacó que es fundamental que los docentes comprendan que la educación emocional no se limita a trabajar con un par de emociones, sino que debe incluir la prevención de problemas de salud mental.
A continuación, María José Palmero, especialista en Educación Emocional y entrenamiento en Habilidades Socioemocionales Training Theraplay, presentó ‘Cómo hacer que los padres de mis estudiantes estén conmigo y no contra mí: Trabajo en equipo efectivo entre Familia-Escuela’. Su intervención tuvo como fin dotar a los participantes de estrategias para regular sus emociones y relaciones de manera más efectiva, lo que contribuye a una mejor calidad de vida y a un ambiente más armonioso y colaborativo. Palmero resaltó la importancia del trabajo colaborativo entre la Universidad de Tarapacá y la ADEP, indicando que “mientras los distintos actores de la educación puedan unirse para trabajar juntos, llegaremos más lejos. Además, que se junte tanta gente es espectacular, porque genera un lenguaje y una mirada común”.
La tercera presentación que dio el cierre a la jornada fue del Dr. Miguel Ángel Santos Guerra, catedrático emérito de la Universidad de Málaga, quien abordó el tema ‘Docentes del Siglo XXI: Enseñar y aprender a convivir en la escuela’. Su intervención buscó sensibilizar sobre la relevancia de la escuela para las personas y la sociedad, proponer un perfil de docente competente para el Siglo XXI y reflexionar sobre la educación como una tarea compartida por todos los agentes de la sociedad. El Dr. Santos Guerra destacó que el congreso abordó temas cruciales que han sido desatendidos por mucho tiempo y que requieren atención urgente.