
Durante la mañana del pasado miércoles 21 de diciembre, alrededor de 60 profesores jefes de la ciudad de Arica se reunieron en la universidad de Tarapacá en respuesta a la convocatoria realizada conjuntamente por el Centro de justicia Educacional, la escuela de psicología y filosofía de la UTA, y la SEREMI de Educación de Arica y Parinacota. Actividad que está alineada con la Política Nacional de Reactivación Educativa Integral “Seamos Comunidad”.
El propósito de este encuentro fue poder comentar directamente con los profesores jefes aspectos de salud mental, violencia y convivencia escolar. El Dr. Jerome Flores Jara, coordinador de la actividad, agradeció la participación de los asistentes y reiteró el compromiso de la UTA en vincularse con las comunidades educativas.
La jornada comenzó con el Taller titulado “Violencia en la escuela: ¿Cómo nos afecta? Una reflexión desde y con las y los profesores”; actividad diseñada por el equipo del recientemente creado TEETra Lab (Teacher Education For Educational Transformation Laboratory) de la Universidad de Tarapacá.
“El objetivo del taller fue visibilizar aquellas acciones cotidianas que han naturalizado la violencia e identificar estrategias que permitan interrumpirlas”, comentó la investigadora Nathaly Arias Bacarreza, integrante de TEETra Lab y jefa de la Unidad Técnico Profesional de The International School Arica (TISA). La segunda parte de la jornada fue facilitada por el académico Cristián Pinto, con una ponencia sobre escuelas sensibles al trauma. En ella, se destacó el rol irremplazable de los profesores jefes en comprender la carga emocional que traen sus estudiantes y ayudarles a superar sus contextos familiares de vulnerabilidad.
¿Cómo nos afecta la violencia? ¿Cómo la podemos interrumpir?
No hay duda que la violencia en las escuelas afecta la convivencia escolar, pero lo que no está tan claro es cómo gestionar una convivencia escolar que permita interrumpir la violencia. El académico Alex Montecino, profesor del departamento de matemáticas y fundador de de TEETra Lab, explica que la literatura ha identificado muy bien el rol clave que tienen los profesores tanto en los procesos educativos de los estudiantes como en la convivencia escolar. No obstante, las estrategias existentes, a juicio de Montecino, no han puesto la suficiente atención en acompañar y apoyar a los profesores en este proceso.
“La pregunta sobre cómo gestionar la convivencia escolar en contextos que enfrentan crisis es muy compleja, y no tiene una respuesta categórica. Lo que sí sabemos es que cualquier estrategia que intente mejorar la convivencia escolar requiere incorporar las voces de los profesores. Nuestra apuesta es generar un espacio de diálogo con las y los profesores que nos permita a todos reconocer aquellas instancias de violencia que se han naturalizado en la práctica pedagógica”, explica Montecino.
En esta línea, el Dr. Jerome Flores, investigador del Centro de Justicia Social y coordinador comunal del programa de intervención en crisis y convivencia escolar, comentó: “Hicimos un estudio en que participaron 624 profesores de nuestra región sobre salud mental docente y los resultados señalan una alta sintomatología en depresión, ansiedad y estrés entre los docentes. Indudablemente esto está asociado a la naturalización de distintos tipos de violencia dentro de las comunidades educativas, lo que es realmente un tema importante para los profesores. Cuando se naturaliza algo, dejamos de cuestionarlo, e inconscientemente lo validamos, lo que alimenta la reproducción de la violencia en las escuelas”, indica Flores.
Por su parte, la investigadora Roxana Chiappa, académica del departamento de educación e integrante de TEETra Lab, está utilizando estrategias de la atención plena, también llamado mindfulness, como un medio que le permita a los profesores pausar y tomar conciencia de las múltiples formas de responder a situaciones de violencia y estrés. “La técnica es muy sencilla y apela al funcionamiento básico del cerebro. Las y los profesores están constantemente corriendo y sobreexigidos por múltiples demandas, por lo no es inusual que cuando se ven expuestos a una agresión física y/o verbal en la escuela, su forma de responder conscientemente o inconscientemente tiende a repetir este patrón. Para interrumpirlo debemos desarrollar una técnica que nos permita pausar para poder responder de manera adecuada en vez de reaccionar con las prácticas que ya conocemos”, explicó Chiappa.
Las voces de los profesores jefes
Durante el desarrollo de la jornada, los profesores jefes asistentes se reconocieron como agentes que interactúan a diario con la violencia. “Estamos llamados a ser los agentes de contención”, indicó una de las docentes. Nathaly Arias Bacarreza explica que los profesores y profesoras jefes suelen asumir un rol de mediadores. Tienen que gestionar la convivencia escolar entre los colegas de asignatura, los estudiantes y los apoderados. “Los profesores tienen mucho sobre sus hombros. Por ello, instancias como éstas son cruciales, pues nos permiten alcanzar perspectiva y aprender de estrategias para gestionar la contingencia desde una perspectiva amable”, concluyó Arias.