
El Centro de Genética y Genómica UASARA de la Universidad de Tarapacá, organizó un seminario cuyos tópicos fueron su quehacer y la relevancia de la Bioinformática, que es informática al servicio de la solución de problemas biológicos.
Durante la actividad se contó con las exposiciones de Wilson Huanca, Dr. en Ciencias y Biotecnología de Plantas; Christian Hodar, Dr. en Bioquímica; y Macarena Fuentes, Dra. en Genética de la Evolución Humana y directora del CGGU.
“La bioinformática es cuando se mezcla, como dice la palabra, la informática y la biología, pero en este caso cuando uno hace genética y genómica… Genética es cuando uno estudia puntos en particular dentro del genoma, y Genómica es cuando uno escanea el genoma completo, pero uno ahí, cuando hace eso, genera una gran cantidad de datos que ya son imposibles de analizar en un computador o a mano. Entonces, ahí es donde entra la informática”, explicó Macarena Fuentes.
El centro, creado hace más de dos años durante la pandemia, surgió para desarrollar la capacidad de vigilancia genómica en la región, inicialmente enfocada en la secuenciación del genoma del SARS-CoV-2. Actualmente, su trabajo se ha expandido a áreas como la salud y la agricultura.
En ese sentido, Wilson Huanca, quien también es académico de la UTarapacá, abordó algunas de las líneas de investigación que se están realizando en el Laboratorio de Biología Molecular de Plantas de la Facultad de Ciencias Agronómicas, donde se utilizan herramientas bioinformáticas para estudiar, por ejemplo, la variabilidad genética en plantas del desierto.
“Empezamos describiendo el trabajo que es la identificación de RNA no codificantes largos en en muestras de maíz yuteño sometida a estrés”, detallando que este se “hace mediante herramientas bioinformáticas, entonces ahí en la plática les presenté todo el paso a paso, que se llama pipeline, de los diversos análisis que se hicieron”, apuntó Huanca sobre su exposición.
Fabián Bugueño, alumno de quinto año en Ingeniería Civil en Computación e Informática, resaltó la importancia de este tipo de charlas para el desarrollo de los alumnos: “Como estudiante siempre es beneficioso tener este acercamiento y además me sirve para aprender más sobre las áreas por las cuales me podría interesar. Este tipo de charlas es un ejemplo vivo de que siempre se van creando nuevas áreas de investigación y es necesario compartirlas para motivar a las nuevas generaciones a seguir los mismos caminos y hacer crecer la rama de bioinformática, que es en este caso, para llegar a nuevos resultados”.