Universidad de Tarapacá entrega a la región un selecto grupo de egresados de la Facultad de Administración y Economía

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En la ceremonia el momento más significativo fue el instante en que la Secretaria de la Universidad, tomó el juramento de honor de los nuevos profesionales.

El pasado viernes 11 de octubre en una solemne ceremonia realizada en el Aula Magna del Campus Velásquez de la Universidad de Tarapacá, se hizo entrega de títulos y grados académicos a un selecto grupo de profesionales de la Facultad de Administración y Economía.

Un total de 46 alumnos que desarrollaron sus estudios de pregrado en las distintas carreras impartidas en esta unidad académica contempló a egresados de las carreras de: Ingeniería Comercial, Ingeniería en Información y Control de Gestión, Contador Auditor – Contador Público, Diseño Multimedia y del Programa Académico Especial de Ingeniería en Administración de Empresas.

En la ceremonia estuvo presente el Decano de la Facultad de Administración y Economía, Luis Mella Salinas, quien dedicó especiales palabras a los estudiantes egresados, haciendo énfasis en los esfuerzos que les demandará su futuro laboral, y en poner en práctica todos los conocimientos adquiridos durante sus años de estudio.

“La Universidad hace un reconocimiento formal a través de este acto donde distingue, valora y certifica de manera formal el trabajo y esfuerzo, la obtención de un logro, que es un logro importante para la Universidad y para todos quienes estamos acá. Esto es lo formal lo cual tiene un trasfondo mucho más importante: es una formalidad transcendente, porque lo que estamos haciendo hoy es reconocer todo el trabajo, esfuerzo y dedicación que durante años un grupo de jóvenes han realizado confiando en nuestra Institución y en nuestra Facultad”, expresó el Decano Luis Mella.

Agregó que, “estamos felices contentos al igual que nosotros y eso también es uno de los elementos que nos hace una pequeña comunidad hoy porque estamos alegres por el logro cumplido. Compartimos con ello la emoción de todos los años, de verlos partir al igual cuando los vimos llegar hace ya un tiempo, donde los vimos niños, esperanzados y con expectativas a un nuevo mundo que era la universidad. Hoy se les abre un nuevo mundo, el mundo profesional, del trabajo y del mundo para conseguir grandes cosas, confiamos en ello, que serán una contribución importante al nuevo mundo que estamos viviendo. Un mundo que demanda, que exige y requiere un nuevo trato con el medio ambiente y de una relación de los seres humanos con su entorno, que es lo que estamos haciendo hoy que es reconocer al otro para construir”.

El acto continuó con uno de los instantes de mayor connotación en la vida de todo profesional universitario que fue la toma del juramento de honor, encabezado por la Secretaria de la Universidad, Paula Lepe Caiconte, para luego proceder con la entrega de títulos y grados académicos a quienes finalizaron una etapa plena de exigencias personales y profesionales.

En esta oportunidad, se distinguió además a los y las estudiantes quienes obtuvieron los mejores promedios de su generación: Lucía Hidalgo Viacava de Ingeniería Comercial, Andrés Flores Terrazas de Ingeniería en Información y Control de Gestión, Verónica Agurto López de la carrera de Contador Auditor – Contador Público y Carolina Sepúlveda Pérez e Ivania Torres Araya de Diseño Multimedia.

En representación de los egresados, las palabras de gratitud estuvieron a cargo de la ingeniera comercial, Lucía Hidalgo Viacava, quien expresó que, “Hace 5 o 7 años atrás, algunos con más convicción que otros, decidimos embarcarnos en la aventura universitaria con la visión de asegurarnos un futuro más próspero para casa uno de nosotros. Lo que no previmos era lo intenso que sería recorrer este camino. Muchos de los que hoy estamos presentes, decidimos no solo dedicarnos a estudiar, sino que también a conocer a nuestros compañeros, participar de las actividades extracurriculares a las que se nos invitaban, deslumbrarnos de la experiencia y conocimientos de nuestros profesores y atrevernos a aprender incluso fuera de la sala de clases”.

Concluyó indicando que, “es nuestro deber resignificar nuestras profesiones con actos concretos si es que realmente nos interesa agradecer a quienes nos formaron y educaron. Sí, maximicemos la utilidad, pero de nuestra profesión. Creemos valor, pero en cada relación que formemos en el trabajo. Que los cálculos de las curvas de indiferencia, no nos hagan indiferentes con nuestro entorno. Que los cálculos de las regresiones no nos hagan retroceder en nuestros valores. Sin importar los años que llevemos trabajando, nunca numericemos a las personas y encarguémonos de siempre, siempre de humanizar los proyectos que desarrollemos”.

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