Emilio Ulloa: leyenda del atletismo nacional

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Hijo de Lastenia Valenzuela y padre homónimo. Ariqueño. El quinto de seis hermanos. Las nuevas generaciones desconocen parte de la rica y gloriosa historia de este ex atleta. Nacido y criado en el corazón del barrio Norte Unido, uno de los más antiguos y tradicionales de la ciudad. Una vida ligada al deporte y a la docencia, ejerciéndola en el Departamento de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la Universidad de Tarapacá.

Sus largas zancadas, espigado físico y la inconfundible melena rizada, eran animadores habituales de las competencias más arduas a nivel internacional. Representando al país participó en dos Juegos Olímpicos, dos Mundiales de Atletismo, un Iberoamericano; y a escala continental en Sudamericanos, Panamericanos y Juegos Odesur. En muchas de esas instancias consiguió importantes resultados; que a la postre, lo situaron como uno de los mejores mediofondistas en la historia atlética del país. A continuación, un repaso de algunas de sus memorables actuaciones.

-En 1981 interviene en un Sudamericano disputado en La Paz, Bolivia. Allí el ariqueño consigue tres medallas de oro y se alza como figura de la delegación chilena. Lo que más adelante sería una constante. Se impone en los 800 y 1.500 metros planos y en su especialidad: los 3.000 metros con obstáculos. Además, fue parte del equipo que consiguió la medalla de plata en la posta 4×400 metros.

-Al año siguiente, en el mes de diciembre, se desarrollaron los Juegos Odesur. Argentina fue la sede. Ulloa nuevamente demostraba su inmensa categoría en pistas trasandinas. La provincia de Santa Fe fue testigo de las medallas de oro, en 3.000 metros con obstáculos; plata, en los 800 metros planos; y oro, en 1.500 metros planos.

-Una de las presentaciones más recordadas fue la que vivió en los Panamericanos de Caracas, Venezuela, en 1983. La portada de “La Estrella de Arica” del sábado 27 de agosto de ese año titulaba: “Medalla de oro a Chile brindó el ariqueño Ulloa”. En los 3.000 metros con obstáculos el atleta nortino otorgaba la única medalla dorada para Chile en tan importante evento. Oro que no se obtenía desde 1963, en los Panamericanos de Sao Paulo, con Marlene Ahrens en el lanzamiento de la jabalina.

-Un nuevo Sudamericano de Atletismo aparecía en el horizonte. Argentina el país organizador. En el penúltimo día de competencia, Ulloa consigue presea de oro en los 3.000 con obstáculos. Pero el ariqueño no se conformaba. En el último día de pruebas, gana plata en los 800 metros planos y nuevo oro en 1.500 metros planos. Chile -por ese entonces- se convertía en la segunda potencia atlética de América del Sur. La generación dorada del atletismo chileno comenzaba a dar frutos.

-El primer Iberoamericano de Atletismo se disputó en Barcelona, España, en 1983. Instancia que aglutinó a diversas selecciones nacionales. En la cita intervinieron más de 250 deportistas provenientes de países de América Latina, España y Portugal. En la pista atlética del estadio “Joan Serrahima”, Ulloa ganó medalla de plata en los 3.000 metros con obstáculos. Chile ocupó el séptimo lugar en el medallero general, sumando en total tres medallas de plata. Las dos restantes fueron conseguidas por Alejandra Ramos, otrora plusmarquista nacional.

-El Círculo de Periodistas Deportivos de Chile premia, desde 1951, al deportista nacional más destacado del año. Por segunda vez, el reconocimiento al “mejor de los mejores” del año 1983 era compartido por dos figuras: Emilio Ulloa y Alejandro Flores, campeón mundial de caza submarina. Para comprender la magnitud de esta distinción, lo han ganado, entre otros: Marcelo Ríos, Iván Zamorano, Tomás González, Elías Figueroa, Fernando González,  Nicolás Massú.

-Año 1984. Llegaba la hora de afrontar los Juegos Olímpicos, competencia que reúne a los mejores deportistas del mundo. Eran palabras mayores. En el estadio “Memorial Coliseum” de Los Angeles, Estados Unidos, el ariqueño se ubicó entre los 24 mejores atletas del orbe, en la prueba de 3.000 metros con obstáculos, accediendo a las semifinales imponiendo un nuevo récord sudamericano. El atleta llegó en la quinta ubicación en su serie, marcando 8 minutos, 29 segundos y 79 centésimas. Lamentablemente no lograría pasar a la final. El consuelo: en las semifinales nuevamente quebraría la marca impuesta por él mismo. Además, se convertía en el primer chileno en disputar una semifinal de atletismo olímpico en pruebas de mediofondo.

-Entonces, según la Fedachi (Federación Atlética de Chile), Ulloa posee el  récord nacional en la prueba de 3.000 metros con obstáculos, logrado ese 9 de agosto en Los Angeles. Marca que ha permanecido inalterable por ya largos 28 años.

-Por último, recordar una gran actuación en suelo chileno. Santiago albergaba una nueva versión de los Juegos Odesur o Juegos Sudamericanos. “La Estrella de Arica” el jueves 4 de diciembre de 1986 titula: “Triunfazo de Emilio Ulloa. El ariqueño se paseó en Santiago”. El atleta imponía sus términos alcanzando el oro en los 1.500 metros planos. Estuvo a dos segundos de quebrar el récord de la prueba impuesto por Jorge Grosser, en 1971. Posteriormente, ganaba un nuevo oro en los 3.000 metros con obstáculos, disciplina que, en definitiva, dominó por largo tiempo en el concierto sudamericano. Sin dudas, uno de los deportistas más exitosos que ha nacido en la ciudad norte de Chile.


 

     

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