Con el objetivo de reflexionar sobre los desafíos estructurales de las universidades latinoamericanas en la inclusión de saberes indígenas y afrodescendientes, el Doctorado en Educación de la Universidad de Tarapacá realizó el seminario “Pensar la universidad desde la interculturalidad. Desafíos para su descolonización”. El evento contó con la participación de la antropóloga Inés Olivera, especialista en educación intercultural de la Pontificia Universidad Católica del Perú y Verónica Figueroa Huencho, académica de la Universidad de Chile, integrante del pueblo mapuche y exsubsecretaria de Educación Superior de Chile.
En su intervención, Inés Olivera cuestionó el rol histórico de las universidades como pilares de la modernidad occidental y de una lógica del mercado en la academia. Criticó los actuales sistemas de aseguramiento de la calidad, señalando que funcionan como dispositivos tecnocráticos que limitan la democratización del conocimiento. Propuso avanzar hacia estándares interculturales que integren otras epistemologías y formas de enseñanza, afirmando que “un enfoque intercultural crítico no es funcional al modelo societal vigente”.
Por su parte, Verónica Figueroa destacó que las universidades fueron diseñadas para consolidar un Estado-nación excluyente, marginando los saberes indígenas. Advirtió sobre el extractivismo epistémico, señalando que “muchos conocimientos indígenas son usados sin reconocimiento, sin marcos de derechos ni reciprocidad”.
Ambas expositoras coincidieron en que las universidades enfrentan una crisis de legitimidad en un contexto de desafíos ambientales, sociales, epistemológicos y competitivos, lo que exige priorizar la reflexión crítica colectiva y el diálogo de saberes.
El seminario fue parte del proyecto Fondecyt “Desafiando el legado colonial: reimaginando el presente y futuro de las universidades”, liderado por las académicas de la Universidad de Tarapacá, Dra. Carolina Guzmán Valenzuela y Dra. Roxana Chiappa Baros. Durante cuatro años, el proyecto buscará generar espacios de reflexión y acción entre universidades latinoamericanas para impulsar transformaciones profundas.
La Dra. Chiappa enfatizó que “uno de los aprendizajes más significativos del seminario es la urgencia de repensar la universidad como un espacio de justicia epistémica. No basta con garantizar el acceso; es necesario revisar críticamente las estructuras, prácticas y discursos que reproducen exclusión”. En tanto, la Dra. Guzmán destacó que el proyecto promoverá espacios de reflexión y acción entre universidades latinoamericanas que deseen emprender procesos de transformación profunda.
En un contexto donde persisten estereotipos hacia los pueblos indígenas y las estructuras educativas han sido históricamente excluyentes, este seminario marca un paso clave hacia universidades que no solo incluyan, sino que se transformen desde la diversidad cultural y epistémica. “En un país donde persisten estereotipos hacia los pueblos indígenas y donde las estructuras educativas han sido históricamente excluyentes, este tipo de iniciativas son claves para avanzar hacia una educación superior realmente intercultural, justa y democrática”, concluyó la Dra. Chiappa.