Con pasión de antropólogo describe el libro “Mil años de Historia de los Constructores de Túmulos de los Valles Desérticos de Arica: Paisaje, Monumentos y Memoria”, el Dr. Iván Muñoz Ovalle, Director del Departamento de Antropología, cuyo lanzamiento se realizó el jueves 19 en el auditorio de la Escuela de Ingeniería Eléctrica-Electrónica.
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Junto con la arqueóloga Dra. María Soledad Fernández Murillo, son los editores de este libro. Esperan sea un importante aporte al trabajo arqueológico y antropológico que la Universidad de Tarapacá lidera en esta región desde hace ya varias décadas, y además sirva como barricada para evitar que los túmulos y su historia desaparezcan bajo la sombra del progreso, como se señala en parte de su presentación..
Según explicó Iván Muñoz, este es un libro interdisciplinario, que cumple con todos los requisitos de edición que exige Conicyt, esto significa ser evaluado por pares externos y contar con un comité asesor científico. Además, la investigación fue financiada por Fondecyt y el Convenio de Desempeño “Desarrollo Estratégico de las Humanidades, Ciencias Sociales y Artes de la UTA” financió su impresión.
Trabajaron para hacer realidad este libro 16 profesionales, entre arqueólogos, bioantropólogos, agrónomos, biomédicos y geógrafos; investigadores con gran trayectoria, también jóvenes antropólogos formados en la UTA y estudiantes de postgrado.
EL LIBRO
Pero dejemos que el libro hable. En la primera parte hay una caracterización del entorno, describiéndose el marco geográfico donde se desarrolló la investigación; la segunda parte se refiere a la búsqueda de los orígenes: quiénes son los agricultores tempranos que construyeron estos túmulos; la importancia en esta historia de los pescadores resaltando los hallazgos de la cueva de La Capilla, por ejemplo. También se analiza la ocupación inicial del valle de Azapa por parte de los pescadores y la explotación de las vertientes.
Luego, tenemos una discusión a partir de dos preguntas de investigación: por qué se produjo la ocupación de los valles y cuáles fueron las causas que llevaron a los pescadores a ocupar estos territorios.
Como está señalado en el título, el tema central tiene que ver con los constructores de túmulos o montículos funerarios, a los que se identifica como agricultores iniciales con una fuerte tradición marítima.
El estudio se concentra en el periodo que va desde el 800 antes de Cristo a 200 años d.C, todo ese proceso que los arqueólogos llaman Periodo Formativo o Agricultura inicial.
El documento de investigación científica se adentra en el conocimiento de la dieta de estas poblaciones y las enfermedades, principalmente bucales, que arroja esa dieta; además de analizar sus patrones habitacionales: cómo vivían, sus hábitos y costumbres.
Se analiza la relación espacial en torno a los cementerios de túmulos versus el paisaje, donde tienen un rol fundamental las vertientes del valle. Otro indicador cultural estudiado es la cerámica, el que se plantea como un elemento fundamental en el contexto de uso e identidad cultural de estas poblaciones.
Hay también estudios específicos sobre los últimos túmulos excavados, en el sector de Cerro Moreno, en el Valle Azapa. Estos estudios están enfocados en conocer la arquitectura de estos monumentos de tierra y fibra vegetal, su sistema constructivo y los recursos naturales utilizados para su construcción. Además se realizaron nuevos estudios desde el punto de vista antropológico físico, entierros que curiosamente corresponden a mujeres adultas.
Producto de esas excavaciones se realizaron 16 dataciones de radio carbono 14, que van desde los 800 AC hasta los inicios de la era cristiana.
Finalmente, se presenta una síntesis en torno a la discusión generada en el estudio de estos primeros agricultores, el entorno y su cultura material.
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LANZAMIENTO
La ceremonia de lanzamiento contó con una variada audiencia constituida por investigadores, académicos y estudiantes, encabezada por el vicerrector de Administración y Finanzas de la UTA, Roberto Gamboa Aguilar, y el director general de Investigaciones, Dr. Horacio Díaz Rojas.
La presentación a cargo del Dr. Iván Muñoz, fue matizada con testimonios de varios de los investigadores que participan del libro, entre ellos, el geógrafo Alejandro Tapia, los antropólogos Bernardo Arriaza, Juan Chacama y Verónica Silva, y la también editora de este documento, arqueóloga María Soledad Fernández Murillo.
Una de las motivaciones que impulsaron la creación de este libro, está reseñada con mucha transparencia en la presentación del libro, lo cual fue resaltado en esta ceremonia y que en parte dice textualmente:
“Esta obra constituye un esfuerzo para mantener en la memoria a los “constructores de túmulos” y representa un sincero tributo a los primeros pobladores costeros, cuyos restos materiales poco a poco se van desvaneciendo bajo la sombra del progreso. En la actualidad los túmulos de los valles de Arica (Azapa y Camarones), Chile, están desapareciendo de manera sistemática debido a la creciente instalación de semilleras y la proliferación de cultivos agrícolas para la exportación. Dentro de este panorama, el presente trabajo constituye una barricada para evitar que los túmulos y su historia desaparezcan en el tiempo, dejando tras de sí una innumerable lista de preguntas sin responder”.
