Tres investigadoras de la UTarapacá participarán como directoras alternas en Núcleos Milenio de Ciencias Sociales

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Dentro de esta adjudicación de proyectos, también se encuentran tres académicas que se desempeñarán como investigadoras principales de los núcleos, extendiendo la presencia UTA en estudios de gran envergadura sobre migración, salud sexual, inseguridad y cohesión urbana, cultura musical, y el impacto de China en América Latina.

La Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) dio a conocer los resultados del Concurso Núcleos Milenio de Ciencias Sociales 2025, un instrumento de financiamiento que busca impulsar la creación de grupos de investigación que avancen en la solución de preguntas complejas y en la formación de nuevos científicos. Este año, seis académicas de la Universidad de Tarapacá se encuentran en cinco de los once proyectos adjudicados y que serán ejecutados a lo largo de tres años.

Se trata de las académicas del Dpto. de Educación, Dra. Andrea Alvarado y Dra. Antonia Mardones, directora alterna e investigadora principal respectivamente del Núcleo Percepciones y Consecuencias de la Immigración (MIGRA); la Dra. Patricia Palma del Depto. de Ciencias Históricas y Geográficas e investigadora principal del Núcleo Impactos de China en América Latina y el Caribe (ICLAC); y la Dra. Andrea Chamorro, del Depto. de Antropología e investigadora principal del Núcleo Sonido y Culturas Musicales (CMUS). Todos estos Núcleos Milenio son renovaciones de su proyecto.

Dentro de las nuevas propuestas adjudicadas este año se encuentra el Núcleo Inseguridad y Cohesión Urbana (NUMIC), con la académica del Depto. de Ciencias Sociales Iquique, Dra. Carolina Stefoni, como directora alterna; y el Núcleo sobre Investigación de Base Comunitaria y Desigualdades en Salud Sexual (DIBASS), que cuenta con la académica del Dpto. de Educación, Dra. Paola Contreras, también como directora alterna de su respectivo núcleo: “Nuestro objetivo es poder construir un centro de excelencia a nivel latinoamericano que nos permita abordar las desigualdades en salud sexual en mujeres y diversidades sexogenéricas”.

“Es un núcleo que tiene un enfoque interdisciplinario”, indicó Contreras, “tenemos profesionales y académicas del área de la salud pública, sociólogas, trabajadoras sociales, psicólogos y del ámbito de educación”, quienes trabajaran en líneas específicas sobre monitorización, prevención y promoción en ámbitos de salud sexual, violencia interseccional y trabajo comunitario.

Los Núcleos son adjudicados a través de concursos públicos ANID en base al mérito científico de sus investigadores, la calidad de sus propuestas de investigación y las posibilidades de impactar a nivel internacional en su disciplina. “Permite un tipo de trabajo y de investigación en red, en colaboración con otros académicos, otras universidades, de manera interdisciplinaria, y situar preguntas que están en las fronteras del conocimiento”, explicó Carolina Stefoni. 

Desde NUMIC, buscan responder a un vacío en el debate público que tiende a reducir la inseguridad a problemas de violencia física y criminalidad, ampliando el enfoque de las complejas y cambiantes interrelaciones entre inseguridad y cohesión en las ciudades contemporáneas: “En contraste, este proyecto amplía el enfoque conceptual, analizando cómo diversas formas de inseguridad afectan la capacidad para construir, mantener o cuestionar la cohesión social, algo especialmente relevante en América Latina, donde múltiples formas de inseguridad se superponen a desigualdades estructurales históricas” precisó Stefoni.

Por su parte, la investigación en ICLAC surge desde disciplinas como economía, ciencias políticas, geografía, historia y antropología, con un foco subnacional. “Nuestro objetivo es analizar diversos impactos de China en nuestro país a nivel general, pero también sus impactos en los territorios. En esta nueva etapa, como equipo hemos decidido enfocarnos en tres áreas: la transición energética verde, extractivismo e infraestructura y la relación entre migración china y soft power”, señaló Patricia Palma.

Asimismo, Palma destacó que “es un proyecto con características únicas en el país y en América Latina. Actualmente vivimos un momento crítico en términos geopolíticos con el creciente rol de China y su rivalidad con los Estados Unidos, competencia de la cual Latinoamérica se ha convertido en campo de batalla estratégico. Esto requiere un conocimiento especializado, y principalmente desde una posición neutral”.

En el caso de MIGRA, buscan estudiar las consecuencias y percepciones asociadas a la inmigración en Chile a partir de tres líneas: fricciones legales, que analiza la relación entre la migración y el aparato normativo; fricciones institucionales y culturales, que estudia cómo las instituciones y comunidades locales interactúan con la comunidad migrante; y fricciones asociadas a las percepciones y cómo ellas se distancian de la evidencia empírica.

“La migración es un tema sobre el que abundan las posiciones basadas en emociones, y nuestro rol como Núcleo Milenio es generar conocimiento basado en evidencia científica que contribuya al debate público”, manifestó Andrea Alvarado, quien se especializa en educación, migración e interculturalidad. 

“Hemos investigado cómo las escuelas desarrollan estrategias para abordar los desafíos que plantea la inmigración reciente; cómo las trayectorias migratorias de jóvenes migrantes inciden en sus trayectorias educativas; y cómo las percepciones de docentes, directivos y familias migrantes construyen fronteras simbólicas y sociales en las comunidades educativas”, agregó.

En esta misma línea, Antonia Mardones, investigadora del mismo núcleo comentó que “haber sido seleccionados nuevamente da cuenta de que el trabajo que realizamos los últimos tres años es sólido, es valorado, es importante para el país, y nos da la oportunidad de consolidarnos como un colectivo que ha aportado evidencia valiosa sobre los desafíos y las oportunidades que genera la migración en Chile”.

Finalmente, el núcleo CMUS es una plataforma de investigación asociativa dedicada a explorar las transformaciones de la sociedad chilena contemporánea a través del sonido, la música y las prácticas auditivas. Desde 2022, ha establecido una red de investigadores en disciplinas como los estudios musicales (musicología, etnomusicología, música popular, estudios sonoros), antropología social, sociología cultural y educación. 

En esta línea, Andrea Chamorro destacó como principal interés el hecho de que “desde Coquimbo hasta Arica, no existen espacios universitarios donde se forme en artes, en ningún tipo de artes, ni en artes escénicas, musicales, plásticas o audiovisuales. Por lo tanto, la oportunidad que da el Milenio, sobre todo para la macrozona norte, es la posibilidad de crear espacios de formación que tengan que ver con artes musicales, escénicas, la posibilidad de crear artes sonoros, visuales, es decir, vincular las artes a la investigación, pero también a la formación”.

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