Tradicionalmente, la calidad de la extensión universitaria no era cuestionada. Sin embargo, el surgimiento de nuevos mecanismos de vinculación, como prestaciones de servicios, pasantías, investigación aplicada, servicios sociales o educación continua han elevado las exigencias, de la misma forma que lo ha hecho el sistema de acreditación.
Nicolas Fleet, quien ha sido director de Estudios de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), director de Calidad Institucional de la Universidad de Tarapacá y actualmente académico de esa casa de estudios, se ha interesado por este tema. En 2017, junto a otros miembros de la Dirección de Calidad de su universidad, publicó una investigación sobre medición de vinculación con el medio financiada por la CNA. Con ese trabajo se comprobó que, en Chile, la acreditación institucional ha sido el principal mecanismo a través del cual se ha avanzado en esta materia, pero que, en cuanto a la medición, no existen prácticas reconocidas en el sistema.
“Instituciones que acumulan tradición de vinculación con el medio no cuentan con metodologías para evaluar y mejorar estas actividades. Ello representa un desafío pendiente de la acreditación institucional”, afirma.
— ¿Por qué la vinculación con el medio aparece como una función nueva de la educación superior?
“Hay un renovado interés en la vinculación con el medio en educación superior, lo que seguramente obedece a la centralidad que en la sociedad actual tienen la educación y el conocimiento para la creación de valor. La vinculación con el medio aglutina una diversidad de funciones con ese objetivo. Pero tampoco podemos ser ingenuos, porque mientras hay vinculación que nace de iniciativas académicas que buscan darle uso público al conocimiento, otras vinculaciones obedecen más bien a la competencia entre instituciones por posicionamiento estratégico y reputación de mercado. No menos importante es la política pública, porque con la nueva Ley de Educación Superior (21.091) la acreditación institucional es obligatoria en esta función. Esto significa que la vinculación con el medio es hoy evaluada con estándares de acreditación que entonces impactan sobre la continuidad de un plantel, su financiamiento y el de sus estudiantes”.
— ¿Qué se entiende por calidad en la vinculación con el medio?
“Es complicado, porque mientras que no hay una delimitación de lo que es vinculación con el medio, especialmente cuando se mezcla con docencia e investigación, la acreditación chilena transita desde una perspectiva de consistencia interna –que orienta la vinculación según los propósitos institucionales– a otra de resultados diferenciados según niveles de calidad A, B y C. Por otro lado, no hay claridad sobre si los nuevos estándares de acreditación incorporarán experiencia internacional, como plantea la nueva ley. En esta perspectiva, vemos que la vinculación con el medio se valora según el medio relevante, ya sea cultural, económico, social, político, etc. No es lo mismo evaluar la efectividad de la transferencia tecnológica sobre incrementos en la productividad que la formación de liderazgos en funcionarios municipales. En Chile, gracias al profesor Heinrich von Baer se ha enfatizado la idea de la ‘bi-direccionalidad’; es decir, que la calidad de la vinculación radica en generar espacios de producción del conocimiento con la participación de los actores del medio. En último término, creo que el impacto de la vinculación con el medio solo puede ser reconocido como tal si es que proyecta el trabajo de académicos, junto con estudiantes y la comunidad, sobre áreas de desarrollo, como cultura local, desarrollo social o salud. En otras palabras, la vinculación con el medio representa una dimensión del ‘valor de uso’ de la educación superior. En este marco, poco importan indicadores de productividad científica, como cantidad de publicaciones, si es que no hay usos concretos para el enriquecimiento de la sociedad. Hay que entender la calidad de la vinculación con el medio como trabajo académico, valor público y contribución al desarrollo”.
— ¿Qué cambios se han visto en Chile en materia de vinculación con el medio?
“Los cambios vienen porque las instituciones se tomarán más en serio esta función para acreditarse. Esto implica dotarla de política, infraestructura, financiamiento y evaluar el trabajo realizado para el mejoramiento de su calidad. En Chile todavía se cuentan con los dedos de una mano las universidades que hacen seguimiento de sus actividades de vinculación. También llama la atención que muy pocas instituciones no universitarias de educación superior estén acreditadas en esta área. Mientras que, por definición, estas instituciones operan estrechamente vinculadas con su entorno, el hecho que la acreditación no valore este rol muestra lo que queda por avanzar. En el corto plazo veremos avances tanto en volumen y diversidad de actividades de vinculación con el medio, como en estrategias de seguimiento y evaluación.
Me gustaría que las universidades regionales, cuyo desarrollo está íntimamente ligado al de los territorios en que se insertan, avancen en demostrar al país la calidad de la vinculación que realizan con el medio. Al final, la calidad de la vinculación con el medio no es un efecto del tamaño y concentración de la educación superior, sino que de los usos del conocimiento para producir desarrollo”.
Fuente: https://digital.elmercurio.com/2019/05/30/EE-STD-X/5A3K2SB6
