La Gymkhana Matemática de Explora y las conclusiones de su tercera versión

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El presente año, el profesor Mario Molina de la Escuela Ricardo Silva Arriagada, no tuvo como meta ganar algún premio en la III Gymkhana Escolar, organizada por el PAR Explora de CONICYT y el Departamento de Matemática de la Universidad de Tarapacá.

En su primera participación junto a sus estudiantes el objetivo fue adquirir experiencia, “y eso se logró a nivel de escuela, pues los niños salieron muy contentos y les llamó mucho la atención esta actividad, las matemáticas a nivel de alumnos es bastante complicada y con la gymkhana se dieron cuenta que puede ser entretenida y es una metodología que podemos aplicar en la escuela”, indicó.

El profesor Molina es profesor de matemática y junto a otros colegas de distintos establecimientos participó en una retroalimentación, proceso que incluyó revisión de los ejercicios matemáticos en que participaron alrededor de 500 jóvenes. Actividad generada para encantar a los estudiantes con la matemática e ir colaborando desde los organizadores con el proceso educativo.

La conversación fue liderada por la directora del PAR Explora de CONICYT, Mónica Navarrete, quien indicó que es una enorme satisfacción cerrar la actividad anual con una reflexión en torno a los resultados y con una evaluación de los profesores, “creo que estamos haciendo historia”, dijo.

Para la profesora Melisa Paredes, del Liceo Antonio Varas de la Barra, fue importante ver los resultados y compararlos, junto con la reflexión de sus colegas. “Fue enriquecedor conocer el punto de vista de los demás, los estudiantes y nosotros quedamos motivados y contentos con el lugar que sacaron, aunque en algún momento tuvieron la incertidumbre sobre las respuestas”.

“Fue provechoso para todos porque nos enteramos sobre las pautas de evaluación que tenían las pruebas y en qué consistían, además nos sirvió para mejorar algunos detalles y dar sugerencias respectos a las preguntas que se tienen que adaptar a lo que vimos en el colegio”, concluyó el profesor Guillermo Martin del Colegio Cardenal Antonio Samoré.

La encargada de la Unidad Técnica del Colegio Abraham Lincoln, María Molina, indicó que es toda actividad que involucra a los estudiantes tiene que ser evaluada, “para ver qué nos faltó, qué hicimos bien, qué detalles no consideramos y que eran importantes, todas esas cosas hay que tomarlas en cuenta para que la próxima vez resulte todo un éxito como ahora. En la Gymkhana Matemática estuvo todo el colegio involucrado, director, profesores y estudiantes”.

Landy Rivera de la Escuela Ricardo Silva Arriagada quedó contenta con este encuentro de reflexión en torno a la actividad. “Fue muy bueno porque nos permite entregar nuestras opiniones, mejorar para las próximas actividades, ver algunas fallas, pues de repente hay una mirada más pedagógica y otra más matemática y eso es bueno, así que esto nos sirve para entrelazar ideas desde las diferentes ópticas”.
Después de dos horas de ver videos, conversar, discutir sobre los ejercicios y pensar en una próxima versión, la directora Mónica Navarrete, finalizó diciendo que éste fue un encantamiento, crecimiento y consolidación de la matemática educativa, que hacía falta ver desde una mirada distinta, de pasarla bien y entretenerse con una de las áreas que es transversal a la actividad humana, pues cualquier trabajo, relación y área del conocimiento dispone de matemática.

Mientras que el académico del Departamento de Matemática, Lautaro Vásquez, manifestó que el feedback, la apreciación de los profesores por los ejercicios, escuchar la experiencia de los colegios y recibir observaciones, fue parte de este encuentro. “La gymkhana aterriza mucho lo que hacemos nosotros y cada año mejora y se aprende de los errores”, finalizó.

Los tres años de la Gymkhana Matemática ya son historia. Las medallas, copas y diplomas, son parte de los premios entregados. Este año se sumó la Zumba Matemática, que cautivó a todos los que por medio día disfrutaron de momentos en que la ciencia exacta tuvo ritmo y carreras en un pasto verde frente al cielo azul sin nubes, en el mes de agosto.

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