En las instalaciones de Corpesca, se realizó la ceremonia que dio por finalizada la primera etapa de El Dorado Arica, proyecto que propuso una solución tecnológica de engorda para el crecimiento comercial del Seriola Lalandi –más conocido como Dorado o Palometa– en la Región de Arica y Parinacota.
Con la presencia de las autoridades de la Universidad de Tarapacá, Corfo, Corpesca y el Centro de Investigación Aplicada del Mar (CIAM) –que llevaron a cabo este estudio–, se presentaron durante esta jornada, los resultados del desarrollo productivo para el sector acuícola–pesquero, que posteriormente podría ser adoptado masivamente en el futuro.
Con este desarrollo de piscicultura se detectó una oportunidad para ampliar el cultivo de otros peces en otras regiones del país. El Programa para la Diversificación de la Acuicultura Chilena (PDACH), en su búsqueda constante por contribuir al desarrollo de las nuevas industrias, identificó al Seriola Lalandi como un recurso potencial acuícola para la zona norte del país.
El interés por su cultivo está dado por su rápido crecimiento, su adaptación a condiciones de cultivo, su sabor y por su valor comercial de US$8 por kilo. Frente a ese escenario, este proyecto de Investigación Aplicada desarrolló la tecnología necesaria para alcanzar la supervivencia en óptimas condiciones de la Seriola Lalandi y con esto ampliar su consumo.
Alfonso Díaz Aguad, Vicerrector Académico de la Universidad de Tarapacá, junto con destacar el compromiso de esta Casa de Estudios Superiores con el desarrollo regional, reconoció la experiencia y compromiso del académico e investigador, Dr. Arnaldo Vilaxa, quien gracias a este trabajo conjunto, cimienta el desarrollo de la acuicultura en la región. “El trabajo colaborativo y estratégico entre públicos y privados es el reflejo de la buena voluntad y de la importancia de alianzas técnicas y profesionales que hoy dan sus frutos”.
Agregó que “como universidad, queremos ser agentes de desarrollo con visión de futuro, generando en la formación de profesionales riquezas y empleo, ejes fundamentales para el desarrollo de la región. Por otra parte, seguiremos llevando nuestros conocimientos académicos a la comunidad, para que puedan resultar en importantes investigaciones como ésta”.
En tanto, Felipe Zaldívar, gerente general de Corpesca, empresa creadora del proyecto señaló que “Por nuestra historia y por nuestro constante desafío de crear valor, nos resulta muy satisfactorio poder dar un cierre de estas características al proyecto del Dorado. Si bien nació como un programa piloto el año 2013, marcó una experiencia pionera en el norte, en la que por primera vez se buscó abordar –a través de la ciencia acuícola– una necesidad de la región, buscando generar un aporte económico en el largo plazo y con potencialidad de empleabilidad en el futuro”.
Por su parte, el académico e investigador de la UTA, Dr. Arnaldo Vilaxa, quien desde el 2013 encabezó el proyecto, expresó que “esta es la fórmula de cómo trabajar en conjunto con la empresa privada. Nosotros como Universidad si bien es cierto, hacemos investigación básica y aplicada pero es importante continuar en la fase productiva. Hoy en día estamos viviendo la investigación aplicada en una etapa productiva para que el día de mañana la región se beneficie con este proyecto”.
La actividad finalizó con un recorrido donde se puso observar el resultado en la producción del pez Dorado.
